A partir del pasado 14 de enero, algo cambió para siempre en tus equipos con Windows 7, cuando se puso fin al soporte. Miles de ordenadores han seguido funcionando después de la fecha. Sin embargo, la transición a otros sistemas no ha sido fácil, pero queremos echarte una mano con toda la información que necesitas saber para iniciar tu camino hacia nuevos sistemas operativos. ¿Nos acompañas?
Los usuarios que siguen ejecutando sus ordenadores en esta versión ya no reciben actualizaciones de seguridad, son más vulnerables y se encuentran en el punto de mira de los hackers. Más aún, en tiempos protagonizados por la crisis del COVID-19, donde miles de empresas han puesto en marcha el teletrabajo.
Los hackers se aprovechan de las debilidades de estos sistemas y ya han empezado los ataques. Por eso, es recomendable actualizar tu PC con nuevos sistemas cuanto antes. Sin embargo el final del soporte de Windows 7 significa algo más:
Aunque puedes seguir utilizando tu PC con Windows 7, estarás más expuesto a riesgos de virus y malware, ya que no recibirás actualizaciones de seguridad y software continuas. Esto supone un grave riesgo para las empresas que siguen trabajando con este sistema, sobre todo, teniendo en cuenta la cantidad de información sensible con la que trabajan a diario: nombres, apellidos y DNIs de clientes, números de cuenta y otros datos financieros…
Windows es un sistema operativo que va evolucionando a medida que lanza nuevas versiones cada año. Sin embargo, es prácticamente imposible mantener logísticamente todas ellas, de manera que se van abandonando las más antiguas para centrar sus fuerzas en las versiones más actuales. Esta vez, le ha tocado a Windows 7, quien ha funcionado hasta 2015 con soporte estándar y extendido, y, a partir de entonces, únicamente con el extendido.
Esto significa que en estos cinco años no se ha seguido mejorando y que hemos utilizado una especie de prórroga del soporte. Aun así, seguíamos recibiendo actualizaciones de seguridad.
Quien quiera seguir utilizando Windows 7 y recibir parches de seguridad, ahora tendrá que pagar un mantenimiento exclusivo a Microsoft que durará tres años más. ¿La solución? Actuar a tiempo antes de que ocurra un incidente.
¿Y ahora qué? Las compañías que sigan utilizando este soporte obsoleto quedarán desprotegidas, de manera que, sin quererlo, también desprotegerán a sus clientes en caso de producirse alguna vulnerabilidad con la que robar datos de sus servidores.
A continuación, vamos a hablarte de dos alternativas que muchas empresas están teniendo en cuenta para seguir avanzando tras el fin de Windows 7:
La solución más factible es migrar a nuevos sistemas operativos, por la rapidez y la flexibilidad que ofrecen.
¿Sigues usando soportes técnicos obsoletos? ¿Aún no estás preparado para trabajar de forma rápida e inteligente? ¿Cómo estás protegiendo tu negocio durante la crisis del coronavirus? Las empresas que siguen trabajando con soportes obsoletos han entrado en el tiempo de descuento y corren grandes riesgos.
Durante los últimos años, algunos estudios han comprobado el número de negocios que seguían utilizando Windows 7, lo que demuestra que “es el sistema operativo principal de la quinta parte de grandes compañías”. Si tú eres una de ellas, te recomendamos tener mucho cuidado. Al no recibir las actualizaciones de seguridad necesarias y no corregir los fallos del sistema, los hackers pueden aprovecharse fácilmente de estas vulnerabilidades para entrar en tus ordenadores.
Por lo general, para los usuarios que utilizan sus ordenadores de forma eventual no presenta demasiados riesgos mantenerse en esta versión, pero para quienes lo utilizan a diario, sí.
Ahora que la seguridad está en tus manos, ¿por qué no actualizas tus sistemas?
¡Piénsalo y actúa antes de que sea demasiado tarde!