¿Tu empresa necesita un cambio radical en los sistemas que utiliza? ¿Todavía no has encontrado el software adecuado? ¿Quieres acelerar la adopción de nuevas aplicaciones?
No estás solo, estas preguntas son el pan de cada día en muchas empresas. Por difícil que parezca, es buena señal, porque significa que estás dispuesto a salir de tu zona de confort e innovar. Significa también que eres una compañía ambiciosa dispuesta a afrontar el cambio. Y en el peor de los casos, desconocerás cómo es la tecnología que está revolucionando el mercado de las aplicaciones y sistemas en la actualidad. Pero estamos para contártelo. ¿Vienes?
Imagina que eres un programador, analista u otro profesional que forma parte del desarrollo de software. Necesitas conocer una serie de reglas que proporcionen el marco de referencia para guiar su construcción ¿verdad? Ese marco recibe el nombre de arquitectura de software. En la actualidad, ha sido calificada como el nivel más alto del diseño de arquitectura de un sistema y hace posible la interacción entre las distintas partes del software.
Cada nivel de diseño y desarrollo de estos sistemas presenta sus propias técnicas de análisis, sus reglas de composición, sus problemas, sus ventajas, etc., entre sus modelos podemos encontrar:
¿Ya sabes cuál encaja mejor con tu compañía? Todo lo que vamos a contarte a continuación define la forma de trabajar de un sistema.
Como te decíamos al principio, el desarrollo de software sigue una serie de pasos en su construcción, pero ¿sabes cuáles son? Aunque existen distintos modelos de arquitectura y procesos de desarrollo, podemos encontrar los siguientes arquetipos comunes, que describen los elementos y la relación entre ellos:
Puede utilizarse para estructurar programas que pueden descomponerse en subtareas. Cada una de ellas proporciona servicios a la capa siguiente y podemos encontrar las 4 comunes: capa de presentación, de aplicación, de lógica de negocios y de acceso a datos.
Basa la construcción de las aplicaciones en un conjunto de pequeños servicios que se ejecutan en su propio proceso y se comunican con mecanismos ligeros. Por ejemplo: una API con recursos HTTP. Cada uno de estos servicios independientes se encargará de implementar una funcionalidad.
El primero, se encarga de proporcionar servicios a múltiples componentes del cliente, mientras que este solicita servicios del servidor. Se trata de una especie de ‘escucha’ constante de las solicitudes del cliente.
Suele utilizarse para replicaciones en la base de datos (la maestra es la fuente autorizada y las esclavas se sincronizan con ella). Estas dos partes distribuyen el trabajo y calculan el resultado final de toda la actividad que realizan dichos esclavos. Este patrón es una arquitectura fundamental que los desarrolladores utilizan cuando tienen dos o más procesos que necesitan ejecutarse de forma simultánea.
Se utiliza, sobre todo, para la estructura de sistemas que producen y procesan una secuencia de datos. En la ingeniería de software, el filtro de tubería se aplica cuando los datos de entrada deben transformarse en datos de salida a través de componentes para el cálculo. Los componentes reciben el nombre de ‘filtros’ conectados entre sí por ‘tuberías’ que transmiten los datos.
Es usado para estructurar sistemas distribuidos con componentes desacoplados (pueden interactuar entre sí). El responsable de coordinar la comunicación entre los componentes es el intermediario. Podemos encontrarlo en software de Message Broker, como la plataforma de software Apache ActiveMQ, por ejemplo.
Es el conocido MVC, que divide una aplicación interactiva en tres partes (modelo, vista, controlador) encargadas de contener la funcionalidad, mostrar la información al usuario y manejar su entrada. Este patrón de arquitectura de software separa los datos y la lógica de negocio de una aplicación de su representación.
Es usado para el diseño de un componente que interpreta programas escritos en un lenguaje y define cómo hacer la evaluación de las líneas de programas. “La idea básica es tener una clase para cada símbolo del idioma”.
Sus principales elementos son: la pizarra (memoria global estructurada), fuente de conocimiento (módulos especializados) y componente de control (encargado de seleccionar y ejecutar los módulos). Suele utilizarse para el reconocimiento de voz, identificaciones, seguimientos, etc.
Todos los elementos individuales se les denomina ‘pares’, que pueden funcionar tanto como ‘cliente’, como ‘servidor’. Además, pueden ir cambiando su rol con el paso del tiempo.
Aunque todos los patrones que hemos definido en este post comunican la imagen de un sistema, no son arquitecturas en sí. El mundo de los desarrolladores es largo y complejo, pero la arquitectura de los sistemas y aplicaciones es vital para su funcionamiento. La arquitectura es quien diseña todas las entrañas del software, desde la estructura de sus datos hasta los algoritmos, y permite:
Ahora que ya sabes lo que son las arquitecturas de software y para qué sirven, es el momento de pensar qué necesitas y por qué. ¿Tienes dudas? Contacta con nosotros sin compromiso.